En el marco de la quinta Feria Intercultural de Empresarios del Outaouais, InnovaMag se contactó con integrantes de la organización comunitaria Invernaderos Urbanos Notre-Dame (del francés, Serres urbaines Notre-Dame, SUN), para interiorizarse sobre el innovador proyecto social y económico, que impulsa la entidad en el barrio Viejo Gatineau, ubicado en la ciudad homónima.
Realidades a cambiar
De acuerdo a información proporcionada por SUN, en el barrio Viejo Gatineau reside una importante porción de la población de la ciudad, en su mayoría familias, cuya situación social y económica es precaria.
El índice de propiedad es bajo (16% menos), si le compara con otros sectores de la ciudad. En general, la población del Viejo Gatineau presenta niveles de instrucción menores al promedio de la población quebequense y de la propia ciudad.
Diversos indicadores, como el trabajo, el desempleo y las prestaciones de ayuda social, muestran que los habitantes del Viejo Gatineau enfrentan diversas dificultades a nivel económico.
Por otra parte, cada vez más los ciudadanos se muestran inquietos por su alimentación y por la proveniencia de los alimentos, que consumen. En este sentido, “el acceso a una alimentación de proximidad (local) sigue siendo un reto para todas las ciudades de Quebec y Gatineau no es una excepción”.
Solución innovadora con impacto social positivo
Durante los últimos años, la Ciudad de Gatineau integró a la agricultura urbana en su Plan de Desarrollo, y desde el pasado mes de abril de 2016, implementa un programa municipal dedicado a la mencionada modalidad productiva.
De acuerdo a información proporcionada a nuestro medio por Ignacio Zárate, agente de proyecto de SUN, la entidad comunitaria tiene como propósito promover el desarrollo socioeconómico y el embelecimiento del barrio Viejo Gatineau, a través de un proyecto de empresa colectiva dedicada a la ‘agricultura urbana‘.
“Diversos estudios sostienen que el ejercicio de la agricultura urbana promueve el desarrollo sostenible de las comunidades. En primer lugar, ofrece un acceso local a los alimentos cultivados, lo que resulta en menores costos para las familias y aumenta el consumo de productos frescos. En segundo lugar, este tipo de agricultura ofrece oportunidades laborales en el corazón de los barrios, a la vez que promueve el desarrollo de las capacidades de sus ciudadanos”.
Fuente: SUN.
El proyecto SUN, que cuenta con el patrocinio de la Ciudad de Gatineau, está previsto que se cumpla en tres etapas, a desarrollarse entre los años 2017 y 2020. Actualmente, la organización comunitaria realiza una serie de eventos benéficos para recaudar fondos y una campaña de financiamiento social en línea.
La infraestructura necesaria para la realización de los planes de obra, incluye el actual edificio del mercado municipal Notre-Dame y futuras estructuras a erigirse en los alrededores. Se prevé acondicionar un espacio para la transformación de alimentos, instalar pequeños invernaderos-escaparates para la venta al público y una boutique-café, a ubicar delante del Mercado Notre-Dame.
En la etapa final del proyecto, se montarán seis grandes invernaderos de 17.000 pies cuadrados (1.580 m²) cada uno en el parque Sanscartier o en las proximidades del Mercado Notre-Dame. Su propósito será la producción intensiva de hortalizas, que se distribuirán localmente en almacenes independientes y tiendas de productos gourmet.
Cuando se completen todas las fases del proyecto SUN, la empresa colectiva, que adopta la misma denominación, creará alrededor de 30 puestos de trabajo en el barrio, que en su mayoría no serán especializados.
Acerca de SUN: Empresa colectiva y organización comunitaria
Invernaderos Urbanos Notre-Dame (SUN, de acuerdo a sus siglas en francés) es una empresa colectiva, que desea contribuir al crecimiento económico y la vitalidad social del barrio Viejo Gatineau, través de la agricultura urbana y la creación de empleo.
La organización sin fines de lucro está integrada por personas, que muestran interés por revitalizar del sector Notre-Dame del Viejo Gatineau. Al respecto, manifiestan ser “residentes, profesionales y gente de negocios, que trabajan en el barrio, adictos a la buena alimentación y a estilos de vida saludables”.
